viernes, 5 de abril de 2013

Roscon

   La pasada semana decidimos preparar un roscón típico de pascua. Siendo la primera vez que lo hacíamos el resultado fue tremendamente expectacular, en tamaño y sabor.



-ROSCÓN DE PASCUA-




6 Huevos M
80 Gms. De mantequilla
150 Gms. De azúcar
25 Gms. De levadura fresca
125 Gms. De leche (si hay que pesarla)
880 Gms. De harina de fuerza
1 Cucharadita de esencia de anís
Zumo de ½ naranja
Ralladura de limón
Ralladura de naranja


    Sacamos los huevos y la mantequilla del frigo y dejamos a temperatura ambiente.
    Templamos la leche en el microondas y disolvemos el cubo de levadura en ella.
    Cascamos los huevos en un bol, añadimos el azúcar, el anís, las ralladuras de fruta, la mantequilla (fundida en el microondas y fría); mezclamos con unas varillas, ¡ojo! Mezclar no batir. Continuamos añadiendo la leche con la levadura, mezclamos también.
    En otro bol grande colocamos la harina; hacemos un hueco en medio y añadimos la mezcla de huevos; mezclamos con una cuchara de madera hasta formar una masa lisa. Si es necesario añadimos un poco mas de harina pero no debemos pasarnos pues el resultado no será tan esponjoso. Pasamos la masa a una encimera untada con un poco de aceite para que no se pegue la masa y amasamos unos 5 minutos.Colocamos nuestra bola de masa en un cuenco untado con aceite también, tapamos con un film transparente o metemos el cuenco dentro de una bolsa cerrando bien; dejamos levar la masa en un sitio cálido durante unas 4 o 5 horas o hasta que la masa haya triplicado su volumen.
    Una vez pasado el tiempo sacamos la masa del cuenco, amasamos en la encimera (untada con un poco de aceite) nuevamente hasta eliminar el aire de la masa. Hacemos una bola, metemos los dedos en el centro y hacemos hueco en ella para dar forma a nuestro roscón. Ponemos papel de horno en una placa, colocamos nuestro rosco. Hacemos con varias vueltas de papel de plata un aro (lo aceitamos también por el exterior)  para colocar en el centro del rosco para que no pierda la forma. Volvemos a dejar subir la masa durante 2 horas en un lugar cálido.
    Precalentamos el horno a 180º.
    Y pasadas las dos horas: batimos un huevo, untamos con mucho cuidado el rosco (que habrá doblado su volumen); ponemos un poco de azúcar en un cuenco, añadimos un poco de esencia de anís y una pizca de agua, tan solo para que este húmedo, ponemos sobre el rosco montoncitos del azúcar aromático. Y finalmente ponemos el roscón en el horno precalentado y dejamos hornear durante 20 o 30 minutos.
    Pasado el tiempo retiramos del horno y dejamos templar….¡si es posible….pues se nos  hará la boca agua y es difícil resistirse!
NOTAS: cuando decidimos preparar un roscón grande como este, y no lo consumimos por completo la  solución es cortarlo en trozos regulares una vez frío, cubrirlos bien con papel de plata y congelarlo. Para consumir basta con sacarlo y descongelar a temperatura ambiente o descongelar en el microondas; el resultado sera un rosco como recién preparado.




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